Visitar el país costarricense ha sido una experiencia única para descubrir su fauna y vegetación salvajes, al mismo tiempo que desconectaba en un entorno único

Costa Rica era uno de esos países a los que siempre tuve ganas de viajar. ¿Pura vida? ¿Paraíso de biodiversidad? ¿El país que abolió el ejército? La fama le precedía. En agosto de este año se presentó la oportunidad de realizar una escapada con agentes de viajes para poder conocer el destino de la mano de Travelplan y no me lo pensé dos veces.

    Maravilloso paseo en lancha hacia Tortuguero

Tortuguero, el lugar ideal para desconectar

Partimos el 24 de septiembre en un vuelo de Iberojet con destino a la capital, San José, llegando ese mismo día por la noche gracias al cambio de huso horario. Dormimos en San José y al día siguiente temprano salimos con destino a Tortuguero. Importante mencionar que, a diferencia de España, en Costa Rica anochece y amanece muy pronto (sobre las 5.30 ya asoma el sol), lo cual nos vino muy bien. Despertarte con luz te anima a ponerte en movimiento para aprovechar el día y ver muchas cosas.

Tras una parada para desayunar en ruta llegamos con el autobús para tomar una lancha hasta el parque nacional de Tortuguero, un paisaje exuberante en el que las dos horas de viaje se hacen cortas, siempre intentando avistar en el camino algún pájaro o animal de cualquier otro tipo.

Llegamos al hotel Pachira Lodge, un establecimiento muy acogedor con unas cabañitas que me recordaban los hoteles de Kenia. Se trata de un lugar ideal para desconectar, sin TV y con una red Wi-Fi que no llega a todas las habitaciones. Eso hace parte de su encanto, en mi opinión. La recepción estaba un poco alejada del resto del complejo y por las tardes al ir sola a la habitación te podías encontrar con la sorpresa de algún animalito. Tenían una piscina en forma de tortuga en la que aprovechamos para darnos un chapuzón.

Una noche realizamos una salida para intentar ver el desove de las tortugas marinas. Lo más importante era que las tortugas no se asustaran ni su comportamiento se viera alterado. A tal fin, las excursiones se tienen que realizar con personal local especializado y un nivel lumínico adecuado. ¿Pudimos llegar a ver el desove? ¡Sí! ¿Mereció la pena? Desde luego, es un espectáculo de la naturaleza realmente hermoso. Es impactante el tamaño de las tortugas marinas, la que pudimos ver media más de un metro.

Otro día pudimos ver un perezoso en un árbol y esa misma tarde al ir a conocer un hotel vimos otro cogido de una rama en el comedor del establecimiento. Son animales extraños y sí, se mueven realmente despacio.

El impactante Volcán Arenal y su parque nacional

Después de dos días muy intensos tuvimos que volver a coger la lancha y recorrer el mismo camino de ida para poder llegar a nuestro siguiente destino: el volcán Arenal. Nos alojamos en el Hotel Lomas del Volcán, un lugar precioso con unas vistas increíbles al volcán.

Ese día al ser viernes aprovechamos para salir por la ciudad, irnos de karaoke y luego a una discoteca. Los agentes del grupo viajero eran encantadores y la verdad es que nos lo pasamos genial.

Animales y vegetación de Costa Rica

La flora y fauna de Costa Rica: un lujo poder vivirlos en persona

Al día siguiente, jornada de excursiones. Salimos en dirección al Parque Nacional Volcán Arenal preparados para un día duro. Primero hicimos una excursión por las faldas del volcán que fue más tranquila de lo que cabía imaginar. Luego fuimos a conocer los puentes colgantes de Mistiko Tour y de ahí, sacando tiempo de donde no había, fuimos a conocer la Catarata La Fortuna. ¡Cuidado! son casi quinientas escaleras, se bajan solas, pero para subir tuvimos que realizar varias paradas. Como punto final nos fuimos a los Ecotermales, unas piscinas termales que van de 32 a 41ºC, justa recompensa después de las quinientas escaleras.

Última parada: Monteverde

Al día siguiente tomamos camino a Monteverde para poder realizar la actividad que todos estábamos esperando: las tirolinas. ¿Se atrevería alguien a hacer un salto al vacío de 7 metros? El paisaje era selvático y lleno de niebla, aunque por momentos no pudieras ver bien el suelo te podías imaginar lo lejos que estabas de él.

Tirolina en Monteverde, Costa Rica.

Probando una tirolina en Monteverde, una experiencia espectacular

Para mi propia sorpresa me atreví a dar el salto – no soy especialmente amiga de los deportes de riesgo – pero me pregunté que cuándo me iba a volver a ver en otra situación así, en semejante entorno natural. La ocasión lo merecía, había que saltar.

Esa noche hicimos una excursión con linternas. En un momento todos las apagamos y permanecimos en medio del bosque escuchando los sonidos de la naturaleza. Pudimos darnos cuenta de que había hojas que emitían luminiscencia y aunque al principio costaba percatarse de ello al adaptar tus ojos a la oscuridad podían verse sin problema.

Todo lo bueno se acaba y ya nos tocaba regresar. No obstante, antes de llegar al aeropuerto nos detuvimos en Trapiche Tour, una visita guiada llevada a cabo por una familia costarricense que nos enseñó sobre cultivo del café, la caña de azúcar y el cacao. Una mención al guía local del viaje que era encantador.

Llegamos al aeropuerto, viaje de muchas horas y reencuentro con nuestras familias. Una experiencia más y otro país que he tenido la suerte de visitar ¿Volvería? Sin duda, estoy segura de que habrá muchas sorpresas nuevas esperándome.

 

CONOCE MUCHO MÁS DE ESTE APASIONANTE DESTINO

Si alguna vez has soñado con sumergirte en la selva tropical, caminar por senderos rodeados de flora y fauna únicas y disfrutar de vistas que te dejen sin aliento, entonces Costa Rica es el destino perfecto para ti.

Uno de los mayores atractivos de Costa Rica es su biodiversidad. Desde los humedales del Caribe hasta las selvas tropicales del Pacífico, el país alberga una impresionante variedad de vida silvestre, incluyendo jaguares, perezosos, monos aulladores, tortugas marinas, y una asombrosa cantidad de aves, como el quetzal y el tucán.

Aventura en la Naturaleza

Costa Rica es un reconocido destino de primer nivel para los amantes del ecoturismo y no es difícil entender por qué. El país tiene más de 25 parques nacionales, reservas biológicas y refugios de vida silvestre que permiten a los visitantes explorar una vasta gama de ecosistemas y actividades de aventura. Tanto si te gusta hacer senderismo a través de un bosque nuboso, practicar rafting en ríos salvajes o deslizarte en tirolina a través de los árboles, Costa Rica tiene algo para ti.

Algunas de los destinos que no te puedes perder son:

• Parque Nacional Tortuguero: el lugar ideal para desconectar, donde podrás ver las tortugas marinas en su hábitat natural que llegan a sus costas a anidar. Realizar un recorrido en bote por sus canales rodeados de una exuberante vegetación es una experiencia única. Durante el trayecto, podrás avistar una gran variedad de animales y aves, como caimanes y monos, mientras te sumerges en un paisaje selvático impresionante.

• El Volcán Arenal: uno de los volcanes más activos del mundo. Aquí podrás realizar caminatas por los senderos que rodean el volcán, explorar la zona con vistas al impresionante cráter y relajarte en las aguas termales que se encuentran en sus faldas. Además, no puedes perderte una excursión por los puentes colgantes del Mistiko Tour que ofrecen una perspectiva única del bosque tropical. La cercana Catarata La Fortuna también es otro atractivo; aunque hay que subir casi quinientas escaleras, la vista espectacular, bien vale el esfuerzo.

• Parque Nacional Manuel Antonio: conocido por su rica biodiversidad y sus hermosas playas. Es uno de los destinos más visitados de Costa Rica. Mientras recorres sus caminos, tendrás la oportunidad de ver animales como monos capuchinos, perezosos y diversas especies de aves tropicales.

• Monteverde y su famoso Bosque Nuboso: un lugar donde el manto de nubes cubre el bosque, creando un paisaje místico. Hogar de innumerables especies, algunas de ellas endémicas, como la rana roja. Además de explorar sus senderos rodeados de niebla, puedes realizar un recorrido por los puentes colgantes, lo que te permitirá admirar el bosque desde diferentes alturas.

• Río Pacuare: uno de los mejores destinos de rafting en el mundo, ideal para los amantes de la adrenalina, mientras navegas por impresionantes cañones y cascadas.

• Parque Nacional Marino Ballena: situado en la costa pacífica sur de Costa Rica, famoso por su formación geográfica única en forma de ballena, que se puede ver desde el aire. Es conocido por ser un excelente sitio para el avistamiento de ballenas, especialmente entre agosto y octubre. Además, ofrece actividades como el snorkel y el kayaking, y se pueden ver especies marinas como delfines y tortugas.

• Parque Nacional Corcovado: ubicado en la Península de Osa, es considerado uno de los parques más biodiversos del planeta. Con su selva tropical, ríos y playas vírgenes, Corcovado es el destino perfecto para quienes buscan una experiencia auténtica en la naturaleza. Aquí podrás observar jaguares, tapires, monos y aves exóticas.

• Parque Nacional Cahuita: ubicado en la costa caribeña de Costa Rica, este parque es un pequeño paraíso lleno de belleza natural. Con sus playas de arena blanca, arrecifes de coral y senderos rodeados de vegetación tropical, el parque es ideal para los amantes del snorkel, el buceo y la observación de aves. En sus aguas podrás explorar los coloridos arrecifes, hogar de diversas especies marinas.

• Reserva Cabo Blanco: ubicada en la Península de Nicoya, fue la primera área protegida de Costa Rica. Este santuario natural alberga una rica biodiversidad de flora y fauna. La reserva es conocida por sus playas vírgenes y su ecosistema intacto,
lo que la convierte en un destino ideal para el senderismo y el ecoturismo.

Costa Rica: Cuna de la Sostenibilidad

Un aspecto clave de Costa Rica es su compromiso con la sostenibilidad y la conserva-ción del medio ambiente. El país ha sido pionero en la creación de áreas protegidas y en la implementación de políticas de conservación. Aproximadamente el 25% del territorio
de Costa Rica está protegido bajo parques nacionales, reservas biológicas y áreas de conservación, lo que lo convierte en un líder mundial en ecoturismo. Además, Costa Rica ha dado grandes pasos hacia la neutralidad de carbono, una meta ambiciosa para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Cultura costarricense y tribus

Costa Rica representa un oasis de estabilidad en una región especialmente convulsa, ayudado por su decisión de abolir el ejército en 1949. Las tradiciones como el “pura vida” son sinónimos del estilo de vida relajado y positivo de los costarricenses.
Costa Rica alberga varias tribus indígenas que han sobrevivido al paso del tiempo. Entre ellas destacan los Bribris y Cabécares, que habitan las zonas montañosas y selváticas, conservando muchas de sus costumbres ancestrales. Los visitantes pueden aprender sobre sus rituales, su medicina tradicional y su conexión profunda con la naturaleza.

La mejor época para visitar Costa Rica

Una de las preguntas más frecuentes al planificar un viaje a Costa Rica es cuál es la mejor época para ir. El clima en este país puede afectar las actividades que deseas realizar y el acceso a algunas zonas, por lo que es importante conocer las diferentes estaciones del año antes de decidir cuándo viajar.

A continuación, te explicamos qué puedes esperar según la época que elijas para tu visita:

• La temporada seca, que va desde diciembre hasta abril, es considerada la mejor época para visitar Costa Rica. Durante estos meses, la mayoría de los destinos turísticos se disfrutan con cielos despejados, temperaturas agradables y pocas lluvias. Esto te permitirá aprovechar al máximo las actividades al aire libre, como senderismo, visitas a parques nacionales y días de playa.

De mayo a noviembre es la temporada de lluvias, también conocida como la temporada verde. Durante estos meses, las lluvias son más frecuentes en muchas regiones del país, especialmente en el Caribe y la zona del Pacífico sur. En algunas áreas como Corcovado, el acceso por carretera puede ser complicado debido a las lluvias, incluso si cuentas con un vehículo 4×4.

Aunque el clima en Costa Rica puede ser algo impredecible, es bueno recordar que las lluvias tienden a ser intermitentes y no afectan gravemente las actividades turísticas. Además, la temporada baja tiene sus ventajas, como menos aglomeraciones y paisajes mucho más verdes y exuberantes. En resumen, la temporada seca es la opción más recomendada si buscas un clima ideal para explorar y disfrutar al aire libre. Sin embargo, la temporada de lluvias tiene su propio encanto, con menos turistas y una naturaleza aún más vibrante, por lo que cada época tiene sus propias ventajas dependiendo de lo que busques en tu viaje.

Playas de Costa Rica y otras opciones

Para completar tu aventura en Costa Rica, no puedes dejar de disfrutar de sus playas de fama mundial. Con dos costas, la del Pacífico y la del Caribe, Costa Rica tiene algunas de las mejores playas del mundo para practicar surf, tomar el sol o disfrutar de la tranquilidad. En el Pacífico, destacan playas como Santa Teresa y Playa Tamarindo, perfectas para los surfistas. Mientras que, en el Caribe, lugares como Puerto Viejo te ofrecen un ambiente más relajado, con aguas turquesas y una atmósfera caribeña llena de ritmos tropicales.

Conclusión

Costa Rica es un destino cautivador por su belleza natural y por la calidez de su gente donde la naturaleza, la aventura y la cultura van de la mano. Con un territorio ligeramente más grande que Aragón, te ofrece una experiencia rica y variada tanto si buscas
la emoción de un safari de aventura, un refugio de ecoturismo o una lección sobre la importancia de la conservación ambiental. No lo lamentarás.